“Bonanza” económica y explosión social. A un año de la elección de Alan García, Perú se agita: sindicatos, movimientos regionales, campesinos, pobladores y hasta las clases medias y ONG realizan huelgas, toman aeropuertos, carreteras y locales policiales y apelan a la denuncia pública en movilizaciones de una amplitud como no se veía en más de un lustro. Ausencia de una oposición organizada y creíble.
Perú comparte con Bolivia y Ecuador altísimos niveles de pobreza y desigualdad. El 24,2% de los niños sufre desnutrición crónica; el ministro de Economía, Luis Carranza, declaró que “si para 2011 el índice de pobreza no ha pasado de 50% (índice actual) a 40%, se habrá fracasado”. En lo económico, mientras la rentabilidad de las empresas en lo que va del año es del 32%, el salario, ya irrisorio, ha disminuido en 3,89% entre agosto de 2006 y enero de 2007.
Éstos y otros índices, más la vigencia del racismo (en todas las clases sociales, pero enraizado en una burguesía mentalmente colonial y parapetada tras las Fuerzas Armadas), la exclusión política, el centralismo limeño y la concentración del poder económico en beneficio del capital transnacional, explican los conflictos...
Texto completo en la edición impresa del mes de agosto 2007
en venta en quioscos y en versión digital
E-mail: edicion.chile@lemondediplomatique.cl
Adquiera los periódicos y libros digitales en:
www.editorialauncreemos.cl