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La inclusión social en la Venezuela Bolivariana es una realidad, destacó el Embajador ante la OEA, Roy Chaderton, en la Celebración del 10 Aniversario de la Carta Democrática Interamericana.

La Carta Democrática Interamericana llegó con algo de retardo, y en algunos casos particulares, no animada de las mejores intenciones ante la ampliación indetenible de los espacios democráticos en las Américas, afirmó el Embajador, Roy Chaderton, Representante permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante la OEA.

En la sede del Congreso de Chile ubicado en la ciudad de Valparaíso, este pasado sábado 03 de septiembre, se reunieron los Cancilleres y jefes de delegaciones de los 34 países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA), así como invitados especiales de la región para conmemorar el décimo aniversario de la aprobación de la Carta Democrática Interamericana. Este encuentro lleva por título “Conmemoración Hemisférica del Décimo Aniversario de la Carta Democrática Interamericana y Renovación del Compromiso de las Américas con la Democracia”, organizado en conjunto por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile y la Organización de Estados Americanos (OEA).

Luego de la sesión inaugural, en la cual estuvo presente el mandatario de la República de Chile, Sebastián Piñera, el Canciller, Alfredo Moreno, el Secretario Adjunto de la OEA, Albert Ramdin, y el presidente del Senado Guido Girardi, se continuó con la primera mesa de discusión “La Democracia en las Américas: El Desafío de la Inclusión Social”.

Durante las intervenciones, en la primera mesa, el Embajador Roy Chaderton Matos, Representante Permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante la Organización de los Estados Americanos, manifestó las condolencias del Gobierno y pueblo de Venezuela a los hermanos chilenos por la tragedia aérea que enluta a Chile y que destruyó la vida de “militares, empresarios y comunicadores comprometidos con su pueblo”.

Seguidamente, destacó el alto sistema de democracia participativa adoptado por la revolución bolivariana y afirmó que “Las iniciativas, debates y reflexiones sobre la necesidad de una Carta Democrática Interamericana han coincidido con el crecimiento y propagación de los movimientos de avanzada social en nuestro continente, y con la acertada política de la izquierda latinoamericana cuando ha optado por sustituir el foquismo por la apelación permanente a la confianza del pueblo, nadando contra la corriente y esquivando las trampas de una institucionalidad vetusta”.

Posteriormente refirió que la Venezuela bolivariana adoptó por voluntad popular “la democracia participativa que contiene a la representativa pero va más allá de la relación entre mandante y mandatario. Es la verdadera democracia que tanto temen los falsos demócratas. Su definición se encuentra en los estudios básicos de la escuela secundaria. Recordemos la etimología griega, demos: pueblo, kratos: poder; es decir, el poder del pueblo. Siendo así, la definición y ejercicio de ese poder sólo al pueblo corresponde decidir”.

En este sentido, en 12 años de proceso bolivariano hemos hecho 15 elecciones o refrenda con acompañamiento y testigos internacionales. Catorce veces hemos ganado, para desesperación de los diseñadores de la legitimidad de desempeño que han convocado a mil foros con audiencias cautivas, mientras en todo el continente, inclusive en el norte, los movimientos sociales insurgen contra el dios mercado.

Por tanto, mencionó que todos coincidían en que el origen de la legitimidad de origen está en la voluntad popular, pero llamo a reflexionar, con la presencia de aproximadamente 12 Cancilleres de la región y ahora quién define la legitimidad de desempeño ¿Los Presidentes del Senado o Diputados?, ¿La Organización Demócrata Cristiana de América?, ¿Los “Nobles” dueños de El Clarín o La Nación?, ¿Rupert Murdoch?, ¿la Cadena Fox?, ¿CNN en español?, ¿El Universal de la Familia Ealy?, ¿el Naz-ional o Globovisión?, ¿el Washington Post?, ¿el Señor Roger Noriega?, ¿o el terrorista internacional Luis Posada Carriles?. Y ¿Por qué la OEA no contempla la defensa de la democracia cuando es desestabilizada sistemáticamente por el intervencionismo exógeno?

Finalizó su intervención enfatizando que la democracia política que practicamos con extrema libertad de expresión y participación en la Venezuela bolivariana se legitima y se blinda con el reconocimiento de los derechos sociales. En tal sentido, manifestó que “Hoy en Venezuela, en medio de nuestros aciertos y desaciertos, se dibuja un rumbo progresista. País libre de analfabetismo según la UNESCO, los excluidos del pasado y los ciudadanos del futuro tienen acceso al instrumento subversivo de la educación, a la medicina preventiva y curativa, a la alimentación, a la igualdad de género, el respeto a la dignidad del niño y del anciano con el apuntalamiento de los ingentes recursos redireccionados de las anacrónicas oligarquías hacia el pueblo soberano. Así construimos nuestro concepto del Socialismo del Siglo XXI. Por eso, según la CEPAL, Venezuela es el país que más ha avanzado en América Latina para superar la desigualdad social”.

04/09/2011

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