En kioscos: Marzo 2024
Suscripción Comprar
es | fr | en | +
Accéder au menu

La presidenta Bachelet y su día de la madre. Por Consuelo González Velasquez

Sabemos que las madres son comprensivas, responsables, pacientes y por sobre todo tienen la cualidad del amar. La presidenta Bachelet es comprensiva, el caso cabal lo demuestra, una madre siempre disminuye los errores de los hijos, con dichos tan desafortunados como “me entere por la prensa” y después haciendo una auto-evaluación declara “No tuve fuerza de haber criticado lo que tenía que haber criticado”, aseguro la mandataria. Con una comprensión y tolerancia, que quizás no esté acorde a su cargo.Que una madre es responsable, por lo cual a pesar de los errores cometidos y sin negar que se encuentra bajo la presión dada la poca aprobación salida de las encuestas, Michelle Bachelet da la cara y se hace responsable de la crisis que está viviendo el gobierno por lo que el anuncio de la de poner a disposición los cargos de los ministros no me sorprende , de alguna manera si quiere salir de la crisis o está siendo realmente responsable, al reconocer sus errores y enmendarlos, queda a libre albedrio lo que creamos.

Una madre es paciencia que decir esta cualidad la utilizado en la reforma educacional, ante una idea tan amplia la paciencia es necesaria, pero la impaciencia también aparece en la palestra como es el anunciar una nueva asamblea constituyente, es verdad que esta era promesa de campaña, pero aún se debe resolver los desastre del norte, la ayuda de los sectores cerca del volcán Calbuco, otras cosas que afectan a las personas en este instante y con urgencia. Como me aconsejo mi madre, es mejor un trabajo bien hecho a dos trabajos a medias.

Para puntualizar la mayor virtud de la madre es su amor incondicional ¿amor al poder? ¿Amor al dinero? o ¿verdadero amor a su país y sus electores? .Siempre hay espacio a la duda.

Pero al parecer la presidenta Bachelet cumple las características de una madre y para este día su hijo sanguíneo y su hijo político ¿le pedirán perdón a su madre?

Consuelo González Velasquez.

Compartir este artículo