Cuando Hollywood cultivaba su fibra social

Durante la entreguerra, algunos actores y realizadores estadounidenses muy populares combinaban el apego a los valores tradicionales con una marcada sensibilidad progresista. La trayectoria del cineasta John Ford lo atestigua.

En la época del New Deal, en la década de 1930, decirse de izquierda o expresar alguna inclinación por el Partido Comunista causaba buena impresión en determinados ambientes de Los Ángeles. Después de todo, una de las consecuencias del pasaje al cine sonoro había sido la llegada masiva de escritores oriundos de la costa este, que solían proceder de la inmigración europea, y posteriormente se produjo la llegada de europeos que huían del nazismo.

Esta tendencia pronto preocupó al Federal Bureau of Investigation (FBI), que llegó a abrir un expediente contra el realizador John Ford. Esto podrá parecer extraño a aquellos que recuerden las películas que el irlando-estadounidense dirigió después de la segunda guerra mundial, con sus acentos marciales, y que ven en él a un cineasta reaccionario. Pero sin embargo…