Ese domingo el obrero Juan Vergara estaba en cama aquejado de una fuerte gripe. Desde su lecho escuchó los gritos y los ruidos de las cosas que destruía su hijo menor José, quien vivía un nuevo episodio de descompensación por su esquizofrenia. Como otras veces, el padre y su pareja deciden llamar a Carabineros para controlar al joven de 22 años de edad.
Hasta la modesta casa de la familia en Alto Hospicio llegó un carro policial con cuatro carabineros, tomaron los datos y se llevaron a José Antonio Vergara Espinoza. Desde ese 13 de septiembre de 2015 está desaparecido...
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