Municipios: la bisagra necesaria para el éxito del proceso político y social constituyente

Hace pocos días recordamos en el país que han pasado tres años desde aquel 18 de octubre, que significó una verdadera eclosión social y política para Chile. Un verdadero punto de inflexión para la historia de las últimas tres décadas. Las escenas se sucedían entre fuego, manifestaciones, llamados a la paz, pacíficas y multitudinarias marchas; también violencia, destrucción y por otra parte graves violaciones a los derechos humanos. Todo esto se sucedía, sin pausa, en medio del asombro, el miedo y el entusiasmo de quienes sentían por primera vez, y después de mucho tiempo, que en el país se rompía un silencio de años de injusticias sociales. Un verdadero clamor por dignidad.

“Hasta que la dignidad se haga costumbre” se leía en enormes consignas y ello parecía representar parte de la esencia de esa voz social que no estaba dispuesta a dejar la calle para buscar formas de encaminar este llamado. En este escenario, y cuando la política tradicional parecía completamente perpleja frente a lo que sucedía en este contexto en particular, e incapaz de encontrar una salida que fuera capaz de acoger y encauzar este proceso en desarrollo, fueron los Alcaldes y Alcaldesas, quienes conectados de manera muy cercana con la realidad del territorio y con los matices de las voces que surgían en las calles, abrieron una ventana tras un amplio y transversal pacto por la paz, para ir materializando las necesidades que se iban expresando. Así fue como llamaron a una inédita consulta ciudadana para definir, en una votación electrónica y presencial, las temáticas que la ciudadanía priorizaba y la posibilidad de abordar un proceso constituyente que delineara una nueva forma de pacto social.

El rol de los municipios
¿Qué resulta relevante de analizar de lo ocurrido desde el prisma municipal, más allá de los muchos análisis que ya existen en otros términos? La consulta la lidera y coordina la Asociación Chilena de Municipalidades, una organización que reúne a 320 municipios de las más diversas tendencias políticas. Municipios con realidades diametralmente distintas. Las hay muy ricas y otras muy pobres. Algunas con muchos servicios a disposición de sus vecinos, algunos con muy poco o nulos. Algunas con gran cantidad de población y conectividad. Otras muy aisladas y de bajísima concentración poblacional. En este panorama cada uno de los municipios son el reflejo más claro de los contrastes en que vivimos.

Sin embargo, ninguna de estas diferencias, ni políticas ni sociales, fue impedimento para lograr rápidamente encauzar las diversas voces que surgían. Sin personalismos ni estridencias, logramos generar un amplio acuerdo para llevar prontamente a cabo la consulta y entregar así las primeras luces sobre qué era lo que nuestra sociedad quería y demandaba con tanta fuerza e ímpetu. Tampoco nos faltó decisión para denunciar y visibilizar los riesgos (...)