El desafío de la Academia en la sociedad actual

A causa del violento rapto de Helena a manos del rey Teseo, sus hermanos Castor y Pólux juran venganza, acción que resulta ser finalmente fallida, pues un tal Academo, a la postre héroe de la mitología griega, indica el lugar preciso en el cual se encontraría la hija de Zeus para su rescate. Como premio Academo recibe unos extensos campos pletóricos de olivos, lugar por donde más tarde Platón alejado de las murallas de Atenas, del ruido de guerras y la vorágine diaria, encontraría la tranquilidad para la reflexión y el estudio. En estos campos Platón formó a sus primeros discípulos, constituyendo la academia de Atenas.

Lo anterior, es el relato que hasta hoy nos ha llegado acerca de la raíz etimológica de academia. Algunas de sus características y virtudes serían el tiempo y el espacio destinado a la reflexión, al estudio y al aprendizaje. Así mismo, parece que hacer academia estuvo vinculado desde sus orígenes, a un aislarse de lo mundano para un cultivo reposado del saber. Resulta además notable que ese espacio físico de reunión fuese adquirido en base a méritos, es decir, en retribución hacia una acción considerada digna de premio. Y, finalmente si a la mitología griega nos ceñimos, esta actividad fue desarrollada por una minoría de excelencia con creciente y sostenida influencia, la que no sin pocos inconvenientes, criticaba y de alguna forma guiaba el curso de las masas, aun cuando ello significara enormes sacrificios para sus cultores (quema de libros para escribir uno menos violento).

Evitando una lectura idealizada de los atributos arriba mencionados, es necesario realizar un ejercicio crítico de la academia que hoy conocemos a nivel local. Una pregunta que se empina con fuerza especialmente en momentos en que las sociedades tienden a dejarse llevar por el grito de la masa podría ser: ¿cuál es la contribución de la academia en momentos de crisis?, es decir, en aquellos momentos de penumbra, de desorientación masiva, ¿cómo esta elite ha entregado su contribución clara e inequívoca? Debo admitir en este punto que estas son preguntas incómodas, por ello, no sería extraño que muchos de mis colegas sostendrían que esas contribuciones están y que simplemente yo no las (…)