Se ha dicho que cuando un gobierno no sabe qué hacer con algún tema complicado, forma una Comisión. Sobre el asunto mapuche, antiguamente llamado “Araucano”, se han formado decenas de comisiones. Por ejemplo, la Comisión de Tierras durante el Frente Popular, 1941, llegó a la conclusión que había que devolver todas las tierras usurpadas a los Títulos de Merced, sin pago alguno porque habían sido robadas. Los Títulos de Merced (TM en adelante) habían dejado de entregarse en 1928 y los había sancionado la ley de 1931, esto es apenas 10 años antes que esa Comisión funcionara en el Ministerio de Tierras y Colonización. Calculaban en cien mil hectáreas las usurpadas.
Durante el gobierno de Eduardo Frei se formaron comisiones y un estudio de dos abogados del entonces DASIN, (Osses y Ormeño) calculaba en 250 mil hectáreas las tierras de los TM que ya no pertenecían a los propios mapuches. Todas las comisiones, y en este caso la reciente denominada de Paz y Entendimiento, reconocieron que ha habido un masivo despojo de las tierras mapuches, desde antes por cierto de la mal llamada Pacificación y sobre todo después que el Estado titulara la “reducciones”.
La ley del año 1993 establecía un Fondo de Tierras, que según nos informa la actual Comisión, ha adquirido 230.563 hectáreas. No está para nada claro si esas son tierras nuevas o son simplemente tituladas. El hecho que sea Osorno y Malleco las provincias en que el Fondo ha operado con mayor número de hectáreas permite pensar que son predios cordilleranos o de la costa que simplemente han sido titulados. La falta de transparencia de los datos sigue siendo un tema de gran importancia. El proyecto de ley presentado al Congreso en el 1992, proponía que se le otorgara personalidad jurídica a las comunidades históricas de modo que en forma colectiva pudiesen reclamar las tierras que se le habían usurpado. Como se sabe, durante la dictadura de Pinochet se había procedido “manu milutarii” a dividir las comunidades mapuches, cancelando los TM. Ello hacía imposible el reclamo, ya que un descendiente y actual propietario de una parcela no podía hacerse cargo de la representación de toda la comunidad. Sin embargo, en el Congreso surgieron voces desde la derecha ultra liberal diciendo que no se podía a nadie obligar a pertenecer a una organización comunitaria y fueron incluso al Tribunal Constitucional que falló señalando que se exigían 25 personas para formar una comunidad, apelando a ser descendientes de un titular del TM. Las mujeres dirigentes mapuches, sobre todo, criticaron vivamente esta decisión y dijeron que confundían a la comunidad indígena con una Junta de Vecinos. Muchos protestamos por esta medida señalando que se entronizaba la división interna dentro de las comunidades, cosa que así ha ocurrido lamentablemente. La Comisión nos acaba de informar que en un caso se han presentado 13 solicitudes apelando a un solo TM y que el promedio es de tres demandas por TM. Propone limitar este asunto prohibiendo la presentación de nuevas demandas cuando ya se haya presentado una, lo cual sería igualmente anti constitucional una vez más, si es que la derecha tiene alguna consecuencia y se vuelve a debatir el asunto. Difícil.
Las tierras usurpadas
El concepto de tierras usurpadas se fue constituyendo durante el siglo veinte y se refiere a aquellas tierras que habiendo sido entregadas en TM, han ido a (…)
Texto completo en la edición impresa del mes de junio 2025
en venta en quioscos y en versión digital
E-mail: edicion.chile@lemondediplomatique.cl
Adquiera los periódicos y libros digitales en:
www.editorialauncreemos.cl