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Declaración Pública de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile

Condenamos enfáticamente la represión militarizada, que el gobierno implementó el día 4 de agosto para impedir la manifestación del movimiento social por la educación. El violento desalojo de liceos, la ocupación de recintos universitarios y de lugares públicos por las fuerzas policiales, la violencia excesiva con que se disolvieron las manifestaciones, nos recuerda las prácticas dictatoriales que creíamos haber superado como sociedad democrática.

El llamado de los estudiantes secundarios y universitarios en defensa de la educación pública, ha demostrado en estos dos meses de movilizaciones su carácter pacífico, creativo, inclusivo y contundente, lo que ha permitido a la ciudadanía tomar conciencia de la profundidad de las reformas que deben implementarse para enfrentar esta situación. La respuesta del gobierno ha sido insuficiente y ambigua, apuntando más bien al fortalecimiento del modelo actual, sin satisfacer las demandas del movimiento social por la educación Pública.

Nos parece que las medidas implementadas por el gobierno durante el día de ayer constituyen una violación a los derechos ciudadanos establecidos en la Constitución de nuestro país, la que garantiza la libre expresión de la sociedad, el derecho a reunión y la manifestación pública de la disconformidad ciudadana. Un estado democrático debe resolver las crisis, como la actual, insistiendo en el diálogo participativo de todos los actores involucrados.

Al igual que la mayoría de los chilenos y chilenas constatamos el fracaso del sistema educativo en tanto reproduce y acentúa las desigualdades que son su fundamento, favoreciendo la segregación social y el endeudamiento de las familias. Reafirmamos nuestro compromiso con la educación pública, reconociendo en las actuales movilizaciones una oportunidad histórica para el país, que debemos cuidar, potenciar y preservar.

En ese contexto, llamamos a formar una Coordinadora Nacional por la Educación Pública que permita la convergencia de todos los actores sociales y políticos comprometidos con las demandas ciudadanas por una mejor educación.

Decana
Vicedecana
Directores de Departamentos y Centros
Académicos y académicas

Santiago, 5 de agosto de 2011

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