Derecho a la Comunicación: trayectoria de un concepto

Las luchas políticas y sociales -bien lo sabemos los latinoamericanos- a menudo cobran víctimas. Y éstas no siempre son personas, también al lenguaje le toca su parte, pues las palabras también se ven sometidas a la tensión por vivir o dejar de existir. Igual que en política, es un asunto de fuerza. Conceptos de uso frecuente en América Latina como fueron imperialismo, dependencia o clasismo se enfrentaron en circunstancias históricas específicas a otros que representan intereses diferentes y que operaron para desplazarlos, como los de globalización, economía de mercado o cultura. Mientras los primeros cayeron en descrédito, los segundos colonizaron los discursos oficiales, académicos y mediáticos.

Pero la historia es dinámica y no por dejar de mencionar procesos éstos dejan de existir. No por dejar de hablar de la “explotación” ésta se acaba. Por ejemplo, ¿qué otro concepto explica mejor la presencia de bases militares estadounidenses en 189 países que el de imperialismo? ¿Cómo no explicar nuestra asimetría estructural (tecnológica, económica, social) acudiendo a la noción de dependencia?

Los contextos influyen en el lenguaje de manera dinámica y política. Y nuestro continente vive en la últimas dos décadas uno claro: el de la lucha sostenida contra el neoliberalismo y las inconmensurables injusticias sociales que éste ha generado...