LA CIENCIA DEMAGÓGICA
Por lo general se identifica «populismo» con demagogia, ( Ralf Dahrendorf: «Populistas a la derecha, populistas a la izquierda”). El concepto de populismo es peyorativo y si se trata de demagogia entonces se refiere a degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder. Es decir, engaños. Sin duda que la tentación populista es transversal. Por ejemplo, el neoliberalismo tiene un trasfondo populista cuando descalifica a priori al estado. Para sus ideólogos todo lo que tiene que ver con el Estado es malo y todo lo que tiene que ver con los emprendimientos privados son buenos. Pero, esta opinión conclusiva también podría ser calificada de populista. Sin embargo, debemos hablar con las personas en la calle y nos sorprenderá como tantos tienen opiniones populistas, sobre todo, partiendo por la política, las instituciones democráticas, los parlamentarios, y los funcionarios del estado. Las encuestas también muestran el sesgo populista cuando descalifican las instituciones sin más, lo que explica la baja apreciación popular que tienen los políticos de todos los colores. Y en nada ayuda una prensa monopólica captada por un sector político enemigo supuestamente de la política.
COLETAZOS
El populismo demuestra por una parte un abuso de los que algo saben y una ignorancia de muchos. Pero esta ignorancia aumenta la indignación de personas respecto del sistema político y por consecuencia del Estado, afectando a funcionarios públicos que no son responsables de los problemas generales que la gente reciente. Ello se expresa en agresiones injustificada hacia estos funcionarios, particularmente hacia profesores y personal de la salud. Estos coletazos de la indignación populista está causando mucho daño en las relaciones sociales y obliga a los afectados a tomar medidas de defensas. Se crea un círculo vicioso que aísla a la sociedad. El trabaja se transforma en un problema, un desagrado. Seguramente se están tomando medidas desde el Estado para impedir que esta situación aumente. Pero como todo proceso social si no estamos todos involucrados las mejorías tomaran mucho tiempo.
LA CANCHA NO ESTA PAREJA
Los más afectados por la cantidad de personas son los profesores y los funcionarios de servicios de salud. En el primer caso alumnos y apoderados las emprenden con los profesores, supuesta mente para hacer justicia por propia mano ante actos que estiman abusivos. Y en el segundo caso los usuario reaccionan violentamente cuando creen que la mala atención del servicio es responsabilidad de funcionarios específicos. Estas agresiones constituyen delito, pero son pocos los que confían en las instituciones de justicia por lo que las denuncias no fructifican. Las victimas agredidas son doblemente victimas entonces. Tal como lo señalamos en artículo sobre el sistema de salud publicado en Le Monde Diplomatique, ha sido ampliamente analizado por las propias instituciones estales, Universidades los tribunales los usuarios en cartas a los medios de prensa, extensos reportajes en prácticamente todos los canales, análisis en medios de prensa escritos, las denuncias de los trabajadores de la salud y en estudios académicos diversos. El balance es desbastador: el neoliberalismo en el ámbito de la salud se caracteriza por su enfoque económico y político, afectando gravemente el derecho a la salud y una de sus consecuencias es el enojo de los usuarios que afecta a los trabajadores de la salud.
DOCENTES ACOSADOS
En varios Estados el profesor es considerado el profesional más respetado y el mejor remunerado. Lamentablemente la dictadura destruyo la profesión docente persiguiendo a los profesores y cerrando las escuelas normales. Sin embargo, los profesores ahora están expuesto a una incultura estructural que los menos precia a pesar de que sabemos que la docencia es una actividad en la que deben enfrentar condiciones concretas y específicas que inciden sobre la salud física, psicológica y emocional de las y los docentes. Resultado de un modelo neoliberal implantado por la dictadura la violencia se ha instalado en los establecimientos educacionales, las y los docentes están siendo víctimas de este flagelo social, al punto que la profesión docente está empezando a sentirse y ser de alto riesgo psico social. El Colegio de Profesores ha iniciado una campaña para que las autoridades tomen cartas en el asunto adoptando medidas para brindar seguridad a las y los docentes, sensibilizando a la sociedad en su conjunto, de manera que los establecimientos educacionales sean considerados espacios seguros y protegidos para todos los miembros de la comunidad educativa. No podemos naturalizar la violencia y es urgente y necesario que haya una ley de protección y defensa de los profesionales de la educación, el Estado debe dar herramientas, asistencia y acompañamiento a las y los docentes que sufran hechos de violencia. (Ver Colegio de Profesores, Departamento Salud Laboral Docente). La violencia conta el docente se agrava con la deuda histórica del Estado. En efecto, como denuncia el Colegio de Profesores, la Deuda Histórica es la negación de un derecho salarial adquirido que se le quitó a miles de profesoras y profesores en Dictadura, lo cual redujo directamente sus sueldos por años y, en el marco del sistema de capitalización individual impuesto con las AFP, a largo plazo afectando irremediablemente las pensiones de miles de maestras y maestros jubilados. Pero la Deuda Histórica es más que eso. En primer lugar, se trata de una muestra palpable del daño que infligió la Dictadura a la Educación y a los profesionales docentes: un daño patrimonial originado en 1981 y que se extiende hasta hoy en el marco de una política mayor de destrucción del sistema de educación pública nacional y la organización docente, que incluyó la desintegración de la orgánica nacional que agrupaba a los trabajadores de la educación, la municipalización de la enseñanza, la eliminación de las Escuelas Normales en todo el país y la persecución de miles de profesoras y profesores, que dejó más de un centenar de docentes mártires de la lucha por la democracia y los Derechos Humanos. Esta deuda se ha mantenido a pesar que del retorno a la democracia, desconociendo los compromisos que dirigentes políticos democráticas han hecho. El llamado del Magisterio a Chile es a reparar el perjuicio material que afecta hoy en día, en su abrumadora mayoría, a docentes jubiladas de avanzada edad que durante décadas educaron a muchas generaciones de jóvenes. Reparar la Deuda Histórica es reparar una herida lacerante que hace décadas afecta a quienes educaron a Chile. Por otra parte, muchos docentes en la educación superior trabajan a honorarios, sin seguridad social, incluso con doctorado, recibiendo ingresos propios de docentes sin especialización. Es una situación insólita para un pais que necesita una educación superior de calidad para lograr mejores niveles de desarrollo.
SALUD ENFERMA
La violencia populista también ha alcanzado a los trabajadores de la salud. En efecto, se han hecho recurrentes las noticias con imágenes de usuarios de los sistemas de salud agrediendo a personal de Salud, y mostrando que los controles son insuficientes para protegerlos. Sin duda que la salud publica adolece de recursos para responder la demanda con lo que los servicios no son entregados según las necesidades de los usuarios. Estos reaccionan agrediendo al personal. El sistema de salud es un buen negocio para algunos, para dueños de clínicas privadas, pero el 90% de la población debe optar por la salud pública, sin embargo, esta no recibe los recursos necesarios. Los funcionarios de salud están además mal remunerados. Como consecuencia de la falta de recursos las listas de espera son interminables, personas fallecen esperando ser operadas, hay escasez de medicamentos y alto costo de éstos, falta de horas en la atención primaria, bajo alcance de los exámenes preventivos, congestiones en las urgencias y, sobre todo, las grandes deudas hospitalarias que han llevado a las y los trabajadores de la salud a poner dinero de su bolsillo para comprar insumos básicos que garanticen una atención de calidad a los usuarios ( El Mostrador, https://www.elmostrador.cl/braga/2019/10/26/la-razones-de-la-crisis-estructural-del-sistema-de-salud-publico/.) Por ello, entre otras graves consecuencia, se sostiene que el” Estado debe jugar inmediatamente un rol de aseguramiento de las condiciones sociales y económicas que logren disminuir las brechas de inequidad en salud, cambiando las lógicas de mercado y fortaleciendo al sector público con un enfoque de derechos, y para esto necesitamos urgente una reforma estructural de salud”.
RESPETAR LOS DESC.
El derecho a la salud, a la educación y a la integridad física y psíquica de los trabajadores, son derechos económicos y sociales para lo cual se requiere posicionarlos con energía de manera que todos los órganos, instituciones e instancias del Estado permitan su ejercicio, al tiempo que se transforme en la practica al Estado en un auténtico Estado Democrático y Social de Derecho, es decir en un estado solidario, y continuar profundizando la reforma de la Justicia hoy denunciada por corrupción, ratificando convenciones internacionales sobre derechos fundamentales incluidas las de la Organización Internacional del Trabajo, aumentando las acciones constitucionales para su vigencia, promover la descentralización de la política mediante la creación de mecanismos de participación en la toma de decisiones políticas, tales como plebiscitos, referéndum y consultas populares, crear instituciones estatales del tipo Defensor del Pueblo. No olvidar la vigencia del Pacto de Derechos Económicos, Sociales y -Culturales cuyo rango constitucional es indiscutido, por lo que constituye una obligación para el Estado.