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El oficio de cantora es un canto con otros: la esencia colectiva de la música. Entrevista de Alex Ibarra a Malvina Cabezón Pou

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Pintura de Jorge Araldi

Entrevista a Malvina Cabezón Pou (M.C) Cantora. Realizada por Alex Ibarra Peña (A.I) Colectivo de Pensamiento Crítico palabra encapuchada.

A.I: Muchas gracias por esta entrevista. Escuchando tus interpretaciones, se ve que has tomado posición dentro de una tradición de cantoras dedicadas al cultivo de la música popular. ¿Consideras que hay una definición identitaria de los cantores y cantoras? ¿Cómo llegaste tú a cultivar este tipo de música?

M.C: Gracias a vos. No sabría decirte si hay una definición que nos unifique, en mi caso la música popular es una música que me acompaña desde muy niña en mi casa familiar, algo “natural” entre comillas, como algo que se trae pareciera…en un principio, luego ya de grande uno elige qué y cómo. Y esa elección te define, y te hace tomar posición ante la vida. No tengo muchas certezas en cuanto a pensar la música así que este ejercicio viene fenómeno...jajaja. Sí, te diría, que soy Cantora y no Licenciada en Canto, y es un oficio que abrazo y en donde me siento muy segura, es un lugar de “decidora” que me contiene y en donde puedo descansar tranquila. Como todos los oficios, también lleva tiempo, trabajo, paciencia, y técnica. Es una caja de herramientas que vas completando de cosas, la vas construyendo con el tiempo y cuando necesitas algo la abrís y sacas de allí lo que necesitas según para qué.

A.I: Volviendo a esto de cierta identidad de las cantoras o cantores, ¿te parece que es un cultivo de la música que podríamos considerar como oficio exigente?

M.C: Si cultivar en la música popular es aportarle algo de lo que uno tiene, a la cultura popular, en mi caso, no lo considero un oficio exigente. Me considero una cantora de música popular que emerge de su tiempo-espacio lugar e historia. Quizás puede suceder que la exigencia sea externa, (y en esto siempre va a haber un juego dialéctico con tu propia exigencia), en cuanto a que te ubiques en un género, en que si compones o no tus propias músicas, o sólo sos interprete, qué significa interpretar, etc. Cantidad de exigencias propias y ajenas que aparecen a la hora de teorizar. Pero, estoy segura que se van en cuanto el arte aparece y aflora el oficio, las palabras, lo que uno quiere decir y a la hora de la comunicación con el otro, el mensaje llega de una manera u otra. Aunque ese otro sea muy diferente a vos, algo llega, algo de esa música le provoca al otro y es ahí donde el oficio es agradecido y deja la exigencia de lado.

A.I: Recibiste una formación académica, diría bastante diferente para el ejercicio musical. Pero, en la formalización de los estudios seguro te tocó asumir proyectos de investigación. ¿Aplicas métodos de investigación en la elección de tu repertorio? ¿Dedicas mucho tiempo a la investigación para poder desarrollarte como música?

M.C: Sí, soy Psicóloga Social y antes me recibí de Comunicadora Audiovisual en Bellas Artes. Nada que ver jaja. Como Psicóloga Social que es la profesión que más desarrollé, y además amo, tomé mucho de su metodología, pero más de su técnica que tiene que ver desde ya con lo Grupal, los roles, grupos operativos, pero también con la mirada, la observación, las lecturas implícitas de lo real, la sociedad y su cultura, el poner el cuerpo. Y uno es Cantor pero es con otros, siempre con otros. Sujeto social. Sí pude hacer una síntesis entre las técnicas grupales y como docente de canto. Diría mi maestro Pichón Riviere “un ser de necesidades que sólo se satisface socialmente en relaciones que lo determinan”. La música es colectiva en su esencia. En fin...una teoría que me apasiona la Pichoneana. Pero, yendo a tu pregunta puntual, no sé si tengo un “método” para elegir mi repertorio, si sé que me interesa saber todo del autor, de su historia, del tema elegido, de los ritmos, de la vida privada de los autores, las anécdotas. Lo primordial es que me pase algo con esa canción para luego apropiármela, pasarla por mi cuerpo y hacer de ello algo nuevo de lo que esa obra de arte nos vino a decir.

A.I: Tal vez esta pregunta no te parezca necesariamente como la plantearé. Pero, en quienes interpretan un repertorio cercano al folclor se puede observar algo así como una vocación latinoamericanista. ¿Te sientes parte de esa sensibilidad por nuestro continente?

M.C: Sí, me siento parte de un pueblo que es el Latinoamericano, que tenemos una historia común de sometimiento, de raíces y formas en la que nacieron los pueblos, mirando tanto al norte como a occidente. Si bien también tengo una raíz de abuelos inmigrantes españoles de chica en mi casa se escuchaba folcklore y tango ya de adolescente viajando al norte de nuestro país me enamoré de la música del altiplano, del noroeste argentino que describe sobre todo paisajes y culturas. Y estudiando un poco el canto con caja uno encuentra que el formato de la copla octosilábica es del siglo de oro español y así tantas cosas que se van mezclando con la llegada de los europeos a nuestras tierras. Y la música es todo eso.

A.I: América Latina hoy se encuentra con un creciente deterioro de la democracia, seguramente en la experiencia de la política nacional argentina, aparecen retrocesos que no se veían en años. ¿Nos puedes compartir alguna impresión política relacionada a este tema pensando en el continente y/o en el país?

M.C: Me da mucho dolor lo que estamos pasando, pero uno ve alrededor nuestro y las derechas avanzan en el territorio y definitivamente me lleva a pensar que vivimos situaciones cíclicas en donde, si bien en las conquistas de derechos, las sociedades se modifican, pareciera que en algún momento se llega a los lugares ya conocidos, a las situaciones que los pueblos ya han pasado, sabiendo que esas políticas no hacen más que beneficiar a los que más tienen y dañar de la clase media para abajo, y me refiero puntualmente a las políticas de “endeudamiento”, a la apertura y el libre comercio, a dejar que el mercado financiero se autorregule, a pensar en el derrame, a vaciar el Estado tomando la fortaleza y la regulación del Estado como un exceso de poder y un gasto y no como una inversión en Cultura, en Educación, en Ciencia, etc. En el caso de nuestro país sucede todo lo mencionado, sumado a que quienes lo manejan son los dueños de dicho poder económico, o sea están de ambos lados del mostrador son quienes presentan una política de “blanqueo” y son ellos y sus familias las que blanquean sus bienes, son quienes proponen las obras publicas y ganan las licitaciones sus empresas, son quienes desfinancian la aerolínea del estado, dejando entrar líneas aéreas de ellos y así miles de ejemplos más. No quisiera ir envalentonándome con este tema porque podría seguir y seguir y no terminaría más jajaja. Sólo pensar que por más buenas intenciones que puedan tener mucha gente de este Gobierno actual desde el trabajo político; cuando los que gobiernan son “Los Dueños”, el Estado es tomado como una empresa privada y no hay vuelta que darle. Perdemos. Pero echando una luz a este relato diría que en los momentos de Crisis todos apelamos a la creatividad y surgen lindos movimientos y encuentros también que nos ayudan a sobrepasar el momento. Gracias de hecho por darme este espacio en donde puedo reflexionar desde el humilde lugar que ocupo. En estos momentos de crisis es donde uno más piensa y se piensa. Gracias nuevamente.

A.I: La última pregunta fue un desplazamiento que nos sacó del tema de la música. Suele haber una discusión en torno así el arte debe ser valorado desde otras perspectivas distintas así mismo. ¿Te parece que el arte tiene que ver con lo político? ¿Tienes alguna opinión en torno al artista que se convierte en militante?

M.C: Me gusta pensar que como seres sociales que somos todo lo que hagamos en los diferentes aspectos de nuestra vida van a estar atravesados por nuestro conjunto de pensamientos. Llámalo ideología, llámalo filosofía de vida, etc. Pensamiento sentimiento y acción tres cosas que para mí van siempre juntas. Lo que no significa que esos pensamientos se modifiquen en el tiempo, y estén en constante movimiento. Y el arte es parte de la cultura, asique es muy difícil, que vaya por la vida por separado, que circulen por carriles en los que no se toquen. El artista, como el periodista, el docente, el barrendero, el científico, o la señora que hace tortas, pueden ser militantes de un partido político, de un grupo, de un movimiento social, de un club social y eso es parte de ser un ciudadano con derecho al libre pensamiento y eso no debería ser ni cuestionado ni censurado ni limitado a dejar de realizar su tarea con sus obligaciones y sus derechos. El Arte en mi caso el ser Cantora no es una actividad elevada que pueda sobrevolar la realidad que nos atraviesa a todos los seres humanos. Si quizás, tenés una mayor posibilidad de expresar tus ideas según la visibilidad que tengas. En mi caso no me considero militante porque no tengo una tarea concreta de militancia en ningún lugar, pero mi pensamiento se deja ver muy claramente en mi rol como Cantora, como también en mi rol como trabajadora, hermana, hija, vecina…

A.I: Finalmente, creo que tu último trabajo musical lleva el nombre de “cunitas”. ¿Nos puedes decir en qué consiste y cómo se fue dando este trabajo?

M.C: Te cuento, hace poco saque mi primer disco solista que se llama “Músicas que me Gustan” ese disco que me llevó varios años de trabajo bajo la dirección musical de José Flamenco y músicos esencialmente de La Plata, lo presenté hace muy poquito con el Trio Cunitas, que es mi proyecto musical actual. El trio cunitas somos Candelaria Quiñones (piano) María Bergamaschi (percusión) y yo, surge en 2015 a partir de un programa social del ministerio de Salud de la Nación llamado Qunita, Fuimos convocadas por una de las pediatras de ese proyecto para ponerle música a ese trabajo que estaba destinado a las madres de bajos recursos que recibían un quit preparado con todo lo necesario para que sus bebes contaran con los elementos indispensables y también tenía una parte educativa para la madre. Se realizaban actividades de “contar cuentos” y escuchar música” como parte importantísima de la salud de los niños pero también como un derecho de acceder a los bienes culturales. Ahí entramos nosotras a ponerle música a esas actividades y es así como nos conformamos como trio comenzando, allá por entonces, con la recopilación de nanas, rondas, canciones de cuna e infantiles, tradicionales de toda Latinoamérica, hicimos un cancionero que aun hoy, aunque el trío se fue modificando y ampliando hacia otras músicas y composiciones propias, cada tanto seguimos interpretando aquellas canciones que tienen que ver con nuestro inicio y del que estamos muy orgullosas.

Se escucha a Malvina Cabezon Pou en https://malvinacabezonpou.bandcamp.com/album/m-sicas-que-me-gustan

Páginas: https://www.facebook.com/MalvinaCabezonMusicas/

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