LA UTILIDAD
¿Es la educación superior un lujo o un problema? ¿Si solo se necesitan personas con dos manos para ayudar a los que saben para que más profesionales, como afirman algunos? Desde luego miradas de ese tipo desconocen los cambios estructurales que aporta la tecnología, cada vez se requiere más mano de obra especializada ya que muchas actividades humanas serán reemplazadas por maquinas robotizadas, incluidos aportes intelectuales, la Inteligencia artificial también permitirá realizar trabajos científicos con más eficiencia que nunca antes.
La ideología del libre mercado y del lucro respecto de tareas comunes, como la salud, la educación y la seguridad social, van a contrapelo de la evolución humana. En efecto, los países que más han logrado estándares de desarrollo, sea capitalista o socialista, son aquellos donde, por ejemplo, la educación se ha generalizado, asumiendo el gobierno un rol importante como promotor de la misma. Recordemos que en América Latina concepciones social demócratas lograron aumentar la educación, como fue el caso de Argentina con Perón y de Chile con Aguirre Cerda.
Respecto de la educación, uno de los problemas que aparecen con la educación superior es la falta de planificación y la existencia del lucro. En lo individual muchas personas estudian o fuerzan a sus hijos a estudiar carreras que presuntamente les dará una mejor situación económica. También instituciones de educación privadas que publicitan su oferta sobre la base de mejor rendimiento económico. No es que los futuros profesionales sean invitados a estudiar lo que les guste sino a lo que da supuestamente más ingresos. De allí el fracaso. Resultado frustraciones personales y mucha cesantía. Ese es un proceso que han vivido los países donde la educación es una mercancía resultando con ello exceso de profesionales en algunas disciplinas.
Todo indica que, con más educación pública de calidad, sin aranceles que excluyan a estudiantes ni políticas educativas mercantilistas será posible una mejor calidad de vida. El objetivo de la educación es el desarrollo y no la dependencia.
MÁS EDUCACIÓN PARA UN MUNDO APROBLEMADO
Se podrán resolver los problemas del mundo con mejor con educación que sin ella. La educación es un pilar fundamental para mejorar la calidad de vida de las personas y sin duda que empareja la cancha cuando es para todos. La cultura permite combatir las bajas pasiones y la delincuencia, por cuanto contribuye a que las personas tomen conciencia del sentido de vivir en comunidad.
EL CARÁCTER SUPRA CONSTITUCIONAL DEL DERECHO A LA EDUCACIÓN
El derecho a la educación tiene simultáneamente el carácter de un derecho individual como un derecho social. Como ha señalado el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas, es "todos esos derechos al mismo tiempo. También, de muchas formas, es un derecho civil y político, ya que se sitúa en el centro de la realización plena y eficaz de esos derechos. A este respecto, el derecho a la educación es el epítome de la indivisibilidad y la interdependencia de todos los derechos humanos". El derecho a la educación como todos los derechos fundamentales tiene un contenido esencial que constituye una base de aplicación directa e inmediata, que impide su desconocimiento o desnaturalización. Diversos atributos integrantes del derecho como podría señalarse técnicamente están asegurados por el artículo 13 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas.
MÁS EDUCACIÓN MÁS CONCIENCIA
Presumimos que una mejor y mayor educación permite a las personas tomar mejores decisiones no solo para si mismo sino para todos. De manera que uno de los problemas actuales, por ejemplo, la escasez de agua en el mundo podría enfrentarse mejor si la educación es más amplia. En particular cuando existen tantos indicios que nos encontramos como humanidad frente a una grave crisis hídrica. En efecto, recientes estudios han demostrado que la escasa nieve del Himalaya amenaza el agua para un cuarto de la población mundial. Es asi que un informe midió el tiempo que la nieve permanece en el suelo, y este año disminuyó en casi un quinto de lo normal y afecta a Nepal, Afganistán, Bangladés, Bután, China, India, Birmania y Pakistán. Otros ejemplos son respecto a México que acumula años de sequía intensa que genera la quema de cultivos, la proliferación de incendios y, sobre todo, la escasez de agua en todo el país, especialmente región capital. Sin embargo, la insuficiente información sobre el Día Mundial de la lucha contra la Desertificación y la Sequía declarada para evitar que los suelos sigan sufriendo y debilitándose por el abuso humano, no contribuye a educar. Para contribuir evitar tal grado de desinformación la educación superior puede jugar un rol esencial.
NECESARIA EDUCACIÓN SUPERIOR
Informes de organismos internacionales, tales como Naciones Unidas, concluyen que históricamente, la educación superior ha sido con frecuencia inaccesible para grupos como las mujeres, las minorías étnicas y raciales, las personas con discapacidad y aquellas en situación de pobreza. El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, aboga por una educación superior accesible, señalando que es necesaria para el “desarrollo completo de la personalidad humana y su sentido de dignidad”. El espíritu del Pacto sirve de base a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que reconocen que el acceso a la educación es vital para el aprendizaje vitalicio. Por ello debemos concluir que la educación superior permite a los individuos expandir sus conocimientos y habilidades, expresar de forma clara sus pensamientos tanto de forma oral como de escrita, entender y dominar conceptos y teorías abstractas, e incrementar su comprensión acerca de sus comunidades y del mundo. Mejor educación condice a una mejor conciencia y darse cuenta que las personas no somos individuos aislados sino parte de una comunidad que debe trabajar junta. El informe de Naciones Unidas ( https://www.un.org/es/impacto-acad%C3%A9mico/educaci%C3%B3n-superior ) sostiene que la educación superior mejora la calidad de vida de los individuos; los estudios muestran que comparados con graduados de educación media superior (preparatoria), los egresados de universidades tienen una vida útil más prolongada, un mejor acceso a servicios sanitarios, mejores prácticas alimentarias y de salud, más estabilidad y seguridad económica, más empleo estable y satisfacción laboral, menos dependencia en asistencia gubernamental, mayor comprensión acerca del gobierno, mayor servicio y liderazgo comunitario, más autoconfianza, y menor actividad criminal y posibilidad de encarcelamiento. Además, los egresados universitarios poseen un mayor índice de acceso a internet, y más tiempo para dedicar a actividades de ocio, entretenimiento o artísticas, así como mayores índices de votación. También es cierto que con mayor educación se cometen delitos más elaborados cuya penalidad, sin embargo, no es están alta como las que reciben personas de estratos culturales mas bajos (Caterini, Mario. (2015). La ética económica y la responsabilidad penal. Revista IUS, 9(35), 123-144. Recuperado en 19 de junio de 2024, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1870-21472015000100123&lng=es&tlng=es. Y ver también Monsalve Vergara, Sergio. 2009. Derecho penal de los poderosos : derecho penal moderno : relaciones entre el delito de cuello blanco y la expansión del derecho penal. Editorial Metropolitana). Desde luego esa diferenciación que podría considerarse discriminatoria, se refiere más bien al tipo de sociedad en la que vivimos y no al hecho de que haya más educación superior. No obstante, la educación superior en los últimos 40 años parece que ha contribuido, entre otras cosas, a una politización más razonada de la sociedad (Soto, Felipe Ghiardo. 2019. Educación superior y estructura social en Chile contemporáneo: aproximación desde el estudio comparado de una cohorte. Memoria para optar al título de Sociólogo. Universidad de Chile), a disminuir las discriminaciones sociales, y a mejorar el lenguaje de la población.
LO QUE FALTA POR HACER
Si bien es cierto que en todo el mundo hay mas profesionales sin empleo, las causas no están en una mayor educación sino en los sistemas económicos que sin duda requieren cambios. Desde luego el sistema universitario ha sido denunciado por abusos y malas prácticas, propias de un sector insuficientemente regulado, que han causado alarma pública, especialmente considerando que atienden muchas veces a los estudiantes no tradicionales y de menores recursos en el país (Zapata, Gonzalo. 2016, ¿Cómo mejorar la calidad de la Educación Superior? Problemas y perspectivas del proyecto de ley de reforma de la educación superior en Chile. Ver en estudios sociales Nº 124 – 2016). Si bien los cambios legales de los últimos años han permitido una mejor regulación del sistema universitario, gracias a los cual algunas instituciones han podido ser cerradas, faltando aun mejorar la fiscalización, también se ha logrado avanzar en gratuidad. Respecto a un enfoque general que beneficie a todos, la propuesta del consejo de Rectores es adecuada. En efecto, sostienen estos que las políticas públicas en Educación Superior deben estar claramente dirigidas a lograr estándares de excelencia en materia de formación de técnicos y profesionales de nivel superior, pregrado y postgrado. Agregan que el conjunto de políticas, normas y medidas que implemente la reforma debe dirigirse, prioritariamente, a elevar los estándares de calidad de la Educación Superior, considerando al sistema en su conjunto y no sólo a un sector de las instituciones o de la matrícula. El Estado debe ejercer la potestad de establecer definiciones y estándares de calidad en la Educación Superior. La calidad debe ser siempre un asunto propio de lo público, considerando las necesidades de desarrollo del país y reconociendo un contexto de diversidad y complejidad del actual sistema ( Ver: https://uchile.cl/dam/jcr:d10cdb43-673d-4a28-ba6b-ff44dfe2ef00/Reforma%20ESup%20PROPUESTAS-CRUCH-PARA-REFORMA-EDUCACI_N-SUPERIOR%20(1).pdf. )
Los Estados, en especial por la vigencia del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, (en adelante PIDESC), se encuentran plenamente obligados a adoptar todas las medidas necesarias para la realización y efectividad de los derechos, incluido el derecho a la seguridad. Más aún, los Estados deben entregar un informe periódico sobre el análisis en profundidad acerca de los reales avances y las dificultades de las políticas aplicadas a nivel interno en materias económicas y sociales.