La existencia y aumento de micro basurales en Valparaíso, es una problemática que afecta cada vez más y en forma exponencial a la ciudad y especialmente las zonas que constituyen laderas de cerros, quebradas e inclusive, es posible verlos en forma recurrente actualmente en el mismo centro de la ciudad. Los micro basurales se consideran procesos espontáneos de disposición periódica de residuos, donde los puntos resultantes de acumulación presentan bajos volúmenes de desechos, por lo cual deberían permitir que sean fácilmente recolectados por los servicios de aseo municipales, pero no siempre ocurre y sobretodo en forma oportuna. Lo cual al no realizarse genera una deficiente gestión de residuos a nivel local y con ello, los múltiples efectos que generan sus inapropiadas disposiciones.
Así lo revela un estudio realizado por la Corporación Ciudades[2], realizado para evaluar y dimensionar la situación, que en sus cuatro ejes aborda el porcentaje de reciclaje de residuos sólidos no peligrosos, la disponibilidad de puntos verdes por habitantes en las ciudades , los micro basurales y la producción de basura por persona. Se analizaron todas las capitales regionales del país, arrojando que apenas el 13,9% de los residuos a nivel nacional llegan a puntos verdes para ser tratados y darle una segunda vida material para que contribuyan a disminuir la basura que llega a los vertederos. El estudio consideró 16 comunas de Chile y se basó en las estadísticas del Sistema de Indicadores y Estándares de Desarrollo Urbano (SIEDU-del CNUD e INE reporte 2022), cuyos resultados grafican comparativamente comunas con micro basurales que poseen registros por cada 10 mil habitantes, tomando como referentes a nivel comunal las del Gran Santiago, Gran Concepción y Gran Valparaíso. En ese sentido, Valparaíso, arrojó una tasa de 6,3 micro basurales por cada 10 mil habitantes, del mismo modo, 11 de las principales comunas registran en promedio 2.6 basurales por 10 mil habitantes, es decir, casi 4 puntos menos. Por otro lado, respecto a la producción de residuos sólidos, el Consejo Nacional de Desarrollo Urbano establece como límite la producción de 1kg. al día por persona. De las 16 capitales regionales, 6 no cumplen la meta y 10 sí lo hacen. Destacando Iquique – Alto Hospicio, como la comuna de mayor producción de RSD y Copiapó como la ciudad de menor producción.
Asimismo, al indagar y hacer una revisión de los diferentes medios que cubren los hechos noticiosos de la región, nos encontramos con diversas publicaciones desde el 2004 a la fecha, en forma más sostenida, que ponen la problemática en la opinión y escrutinio público, señalando su preocupación por la salud física, mental y social de las comunidades, asociado a las implicancias ecológicas; como los daños que su permanencia van dejando tanto a la población como al medio ambiente. Igualmente, la dificultad para avanzar en la superación del problema, aun con acciones de los servicios y gestión de autoridades locales, aludiendo a causales que radican en los hábitos y costumbres culturales de la ciudadanía y su directa responsabilidad en los procesos de acumulación.
Algunos de los relatos, señalan que “Si bien el problema de los micro basurales no es nuevo, sí es una piedra en el zapato que ninguna administración municipal porteña ha podido resolver, pese a que en gran parte de los casos se trata de concentración de basura en espacios reducidos y puntuales que han servido como botadero de desperdicios por años. Así, mientras la autoridad busca dar con la solución; las cáscaras de limón, los restos de comida de las casas, los papeles del baño y las bolsas plásticas, además de ropa, juguetes, sillones viejos, refrigeradores descompuestos, ramas de árboles y escombros, se acumulan en más de 200 puntos repartidos en los 42 cerros de la ciudad patrimonial.” [3]
Otro medio agrega, que “un informe revelado durante la Feria “No + Micro basurales”, realizada en Valparaíso, dio a conocer que Playa Ancha es el sector más copado de micro basurales de los cinco que son intervenidos en la zona por la Corporación Nacional Forestal. Según el reporte, cerca de 300 toneladas de residuos han sido retiradas en este sitio. Por su parte, durante los últimos dos años 945 toneladas han sido ubicadas en 14 cerros de la ciudad de Valparaíso. Además, el programa de Control de Micro basurales confirmó que en la primera etapa de ese proyecto fueron recuperadas en la zona 581 toneladas de basura y en el segundo ciclo del mismo, que se desarrolla hasta el momento, la cantidad de basura retirada asciende a 364 toneladas”[4]. Lo que solo ilustra, la cuantificación del volumen, sin entrar en el detalle de los efectos e impacto socio sanitario.
Otras publicaciones evidencian , no solo la dimensión de la problemática en términos mediáticos , sino que también , la real gravedad y los alcances que se pueden hacer en el deficiente manejo y gestión de residuos sólidos , pues constituye un problema socio sanitario de destrucción del patrimonio ambiental y que favorece los desastres socio naturales en la ciudad de Valparaíso , sin considerar, que pueden ser el origen o causantes, pues atraen vectores o agentes de transmisión de diversas enfermedades contagiosas, incendios, remoción de masas, etc. Así, constituye una problemática que se puede analizar en términos de su origen, magnitud, gravedad, impacto y urgencia.
En cuanto a su origen y naturaleza, el mismo estudio de la Corporación ciudades, revela, un dato que nos lleva a las causas, y su directa relación con la deficiente gestión de residuos, en la cual es posible comparar la inversa relación entre las comunas que más realizan reciclaje y número de basurales que tienen por 10 mil habitantes. Estando Quilpué en el más alto nivel de dicha acción con una tasa de 25,3 comparativamente con Valparaíso, que solo alcanza una tasa de 3.1 respecto a dichas acciones de gestión de residuos sólidos. Pero, en un análisis más de fondo, podría señalarse que radica en los hábitos de consumo de la población y falta de conciencia ecológica y/o educación ambiental, asociado a una cultura de lo desechable. Esto genera complicidad con la falta de servicios de recolección de residuos permanentes, oportunos y eficaces, todo lo cual contribuye a una situación problemática crítica y multidimensional que afecta la sostenibilidad ambiental, por cuanto va contribuyendo a la afectación y daño creciente al patrimonio del barrio donde se emplazan los micro basurales, que puede ser irreversible.
Por ello, la actuación en el corto plazo constituye una urgencia sanitaria y también una prioridad política, por cuanto se generan numerosos riesgos socio sanitarios y potenciales riesgos de fenómenos socio naturales, porque su impacto social, económico, cultural, material y patrimonial, como la creciente existencia, compromete a generaciones futuras y al territorio, generando un aumento en los costos y cada vez mayores y complejos riesgos, tanto para las personas, como la flora y fauna de los barrios donde se emplazan.
Al respecto, podemos agregar, un artículo publicado[5] que concluye: “la importancia de la gestión de los residuos sólidos domiciliarios en ambientes urbanos es de vital importancia en la sociedad que vivimos. Dado que este fenómeno viene de larga data, sin embargo, la incipiente regulación sobre la depositación de basura se ha vuelto una necesidad en el corto plazo. Esto se ve reflejado en las leyes que existen actualmente en la regulación chilena”. Agregando, que “la ciudad es actualmente el lugar propicio para la propagación y aumento de áreas en las que se genera todo tipo de residuos. Esto ha llevado al deterioro del paisaje urbano y rural, donde se han creado serios problemas de salud pública, contaminación del recurso suelo, donde en la ciudad es cada vez más escaso y, de las aguas subterráneas en sectores más periféricos de la urbe. Sin embargo, la complejidad del tema es poder abordar la problemática desde otra perspectiva: una más territorial, donde los patrones de producción y consumo dentro de la ciudad favorecen la generación cada vez mayor de residuos”.
Así visto y por la creciente complejidad del tema, es posible indicar que no basta intervenir y socio educar, pues también estos procesos deben ser con enfoques y pertinencia, en consonancia con el conocimiento de la subcultura y realidad local, por ello el autor plantea, “ por lo tanto, la importancia de la localización de los Micro basurales radica en poder determinar patrones de comportamiento a nivel comunal, saber dónde se están generando la mayor concentración de Micro basurales y qué características de RSD tiene estos Micro basurales”. Porque, “si bien es cierto, el aumento y mejoramiento de los diferentes procesos productivos en el mundo ha llevado a comprender que el problema de la basura es mucho más sistémico que aislado. Pero su máxima expresión se encuentra en la localización, es decir, la utilización de un espacio físico determinado (McKenzie-Mohr, 2000)”[6]. De ahí, la especial preocupación que hay que tener, en cuanto a las especificidades de la realidad local y los hábitos de consumo, como la gestión de residuos y acumulación asociados a estos.
Por otro lado, este fenómeno urbano, se agudiza o tiene su base y arraigo, en el modelo económico imperante y adopción cultural de una sociedad de consumo, constituyéndose el manejo de residuos como problema crítico, caracterizado por la dificultad de insertar la GRS y por la baja responsabilidad ciudadana, lo que desencadena una serie de efectos adversos sobre el medioambiente. Es allí, donde surgen las condiciones para la aparición y formación de un tipo de disposición ilegal de residuos denominado como “micro basurales”, problema que contribuye a la contaminación de suelos y de aguas, la afectación de la calidad del paisaje, proliferación de mal olor, plagas, entre otros.
En el marco de una investigación de tesis de geografía de la Universidad de Chile sobre la temática[7], la autora no solo hace una evaluación y diagnóstico, sino que establece una tipología de micro basurales, basada en cinco criterios: Tamaño, Temporalidad, Materiales de composición, Localización y Cobertura de uso de suelo. Lo que dio origen a cuatro tipos de micro basurales, urbano residencial, consolidado, de ribera y concurrente, esto constituye un aporte y referencia a la comprensión de los mismos para nuestros análisis iniciales, pero no agota la perspectiva, siendo condición necesaria complementar con los imaginarios culturales que subyacen en las comunidades de estas áreas en que se emplazan o del mismo Valparaíso, en relación con los hábitos de consumo, la gestión de residuos y medio ambiente, especialmente.
Finalmente, si bien es cierto que en la bibliografía y políticas relevan la consideración de una serie de acciones prácticas y operativas para superar la problemática de micro basurales, orientada especialmente a intervenciones físicas, geográficas y materiales , tanto los organismos dedicados a la temática como los servicios locales, coinciden asimismo, que la Educación Ambiental es un factor relevante para generar las transformaciones sociales y culturales , y por tanto, debe estar a la base y en forma transversal para que estas acciones tengan permanencia en el tiempo, generando un correlato y actitud de cuidado y protección del medio ambiente. Asimismo, en los cambios de hábitos de consumos fundamentales para el desarrollo e instalación de una cultura de gestión de riesgos y de residuos respetuosa y amigable con el medio ambiente y los seres humanos.
Dra. Violeta Flores F.
Académica y jefe de Núcleo de Investigación Saberes, prácticas y políticas públicas en contextos de desastres del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Valparaíso.
[1] Autora: Dra. Violeta Flores F. Académica y jefe de Núcleo de Investigación Saberes, prácticas y políticas públicas en contextos de desastres del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Valparaíso.
[2] https://corporacionciudades.cl/residuos-y-reciclaje/ (2022)
[3] (Fernando Fierro (28 junio, 2022)” Los Micro basurales Y Los Peligros Que Traen”, Entrelíneas, Diario la Segunda)
[4] (.https://la.network/playa-ancha-sector-mas-microbasurales-valparaiso/
[5] (Morales Soto, Mauricio (2016) “Diagnóstico de la localización de Micro basurales, Región Metropolitana. Nadir: Rev. elect. geogr. Austral ISSN: 0718-7130 Año 8, n° 2)
[6] (Morales Soto, Mauricio (2016) “Diagnóstico de la localización de Micro basurales, Región Metropolitana. Nadir: Rev. elect. geogr. Austral ISSN: 0718-7130 Año 8, n° 2)
[7] temática (ROSS PINEDA, Savka (2019) “EVALUACIÓN Y DIAGNÓSTICO DEL ESTADO DE LOS MICROBASURALES Y LOS FACTORES CONDICIONANTES DE SU FORMACIÓN EN LA EXTENSIÓN URBANA DE LA COMUNA DE COLINA”