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¿Nuevo comunismo? ¡SÍ, Por favor!: Pandemia Žižekiana. Por Nicol A. Barria-Asenjo y Jairo Gallo Acosta.

INTRODUCCIÓN.

La carta robada de Poe (1844) utilizada posteriormente por Jacques Lacan (1988) como uno de los pilares de su teoría, fue rápidamente tomada por uno de los intelectuales más importantes de nuestra época, nos referimos a Slavoj Žižek (1994). En el presente escrito utilizando el prisma psicoanalítico del filósofo se exponen análisis de Chile y Colombia respecto de la llegada del Covid-19 a Latinoamérica y la pronta publicación del libro “Pandemia: el Covid-19 sacude al mundo” (2020). En medio de la pandemia el filósofo esloveno publica el libro siendo este un resumen idóneo tanto entender su obra como el modelo bajo el cual la sociedad actual se ve sacudida por este virus.

EL VIRUS LLEGÓ A DESTINATARIO: ¡CHILE EN EL MISMO BARCO!

Slavoj Žižek (1994) refiere que la única carta que siempre llega a su destino, independiente de las maniobras que se puedan hacer o de los variados intentos por evitar que llegue a su destino o incluso sin saber que había un destinatario, es la muerte. En este sentido, con la pandemia del coronavirus, la presencia de esa carta se vuelve más presente que nunca generando caos y angustia. En las palabras del teórico: “Las dimensiones imaginaria y simbólica de ‘una carta que siempre llega a su destino’ están, así, íntimamente conectadas en su misma oposición: la primera se define por el (des)conocimiento imaginario (una carta llega a su destino en tanto me reconozco como su destinatario, esto es, en tanto me encuentro en él), mientras que la segunda comprende la verdad oculta que se manifiesta en los ‘puntos ciegos’ y las fallas del círculo imaginario”.

Chile, país reconocido como el laboratorio del modelo Neoliberal, no tardaron el llegar los dichos del filoso esloveno quien se refería a la llegada de la pandemia como la pronta modificación y crisis de los modelos capitalistas, además, la posibilidad de su extinción. Para Slavoj Žižek (2020) solo una colaboración internacional lograría que la especie sobreviva a una pandemia que prometía grandes desastres. Para el autor, los países no están preparados para estas sacudidas y las tecnologías terminan por quedar al desnudo. Lo vemos en cada rincón de nuestro país, un país que tiene buenos niveles en producción, economía, números que para cualquier espectador son positivos, sin embargo, con estas crisis humanitarias el país queda exhibiendo su extrema fragilidad. Un país que tiene un lado A y B que en esta crisis aumentó el abismo, un grupo que no tiene más opción que arriesgarse al contagio y otro grupo humano que se resguarda y se protege en la comodidad de sus privilegios.

En su último libro Slavoj (202) menciona: “Debemos resistir la tentación de tratar las actuales epidemias como algo que tiene un significado más profundo: el cruel pero justo castigo de la humanidad por la despiadada explotación de otras formas de vida en la tierra o lo que sea. Pero si buscamos tal mensaje oculto, seguimos siendo premodernos: tratamos a nuestro universo como un socio en la comunicación. Incluso si nuestra propia supervivencia se ve amenazada, hay algo tranquilizador en el hecho de que seamos castigados: el universo (o incluso alguien de fuera) nos está mirando. Lo realmente difícil de aceptar es el hecho de que las actuales epidemias son el resultado de la contingencia natural en su estado más puro, que acaba de ocurrir y no esconde ningún significado más profundo. En el orden más amplio de cosas, somos una especie que no importa”

¿No es este uno de los lemas de Chile?, “la especie no importa” lo que, si importa, es la economía, que los malls no quiebren, que los empresarios no queden arrinconados, no importan los despidos, importa el capital, no importa el hambre, importa la producción. Los dichos de Žižek causaron gran revolución en el mundo, risas, burlas, parece más difícil pensar en la eliminación del capitalismo que en intentar entender los análisis o incluso mirar el funcionar de nuestro Estado.

Lo cierto, es que mientras no se logre valorar lo humano por sobre el capital, las crisis no solo las causarán la pandemia, el dilema de lo humano ya venía sintiéndose desde antes del coronavirus, las calles de Chile desde el 18 de octubre del 2019 ya gritaban el descontento que estos modelos generan. El escenario Postpandemia, puede ser incluso peor que el desarrollo de está.

LO VIRAL IDEOLÓGICO EN COLOMBIA.

Este es uno de los títulos del último libro de Žižek (2020) “Pandemia”, que en vez de ser llamado el “filósofo más peligroso de occidente” debería ser llamado el “filósofo más rápido de occidente”, escribe más rápido de lo que nosotros podemos leerlo. Pero esta rapidez no le quita su acostumbrado análisis provocador, y esta vez el turno es para el tema más importante en nuestra actualidad: el COVID-19.

Para comenzar Žižek (2020) no deja de recurrir a su tema predilecto “La ideología” para relacionarla con el virus: “la ideología actúa como un virus”, y aquí es donde más cómodo se siente Žižek (1989), desde su libro “el sublime objeto de la ideología” este ha sido el tema que ha atravesado casi toda su obra, y esta no podía ser la excepción.

El Coronavirus y su pandemia ha develado alrededor del mundo y más en Latinoamérica y Colombia que el sistema económico social estaba sostenido por unas políticas cada vez más inequitativas, colocando a la mayoría de su población en situaciones precarias a nivel económico, laboral, geográfico, de género y social en general. Es por eso que para Žižek (2020) hay que “encontrar otra forma de producir y asignar los recursos necesarios” (p.55).

Pero en Colombia el presidente insiste en sostener y mantener el sistema económico y social. El gobierno colombiano desde las primeras medidas que se tomó una vez se entró en emergencia por la pandemia fue tratar de salvar el sistema financiero haciéndole préstamos, es como si la frase que aparece al principio del libro de Žižek (2020): “Hegel escribió que lo único que podemos aprender de la historia es que no aprendemos nada de ella, así que dudo que la epidemia nos haga más sabios” (p.7) se estuviera cumpliendo a cabalidad en Colombia, un país donde pasan tantas cosas para no cambiar nada, un país con los índices de inequidad más altos del mundo, una pobreza que ronda casi la mitad de su población, un país donde hay más de siete millones de víctimas del conflicto armado, desplazados, masacres colectivas, persecución y asesinato a líderes sociales, corrupción, desempleo e informalidad de más la mitad de su población. Por todo esto llama la atención que lo más importante para el gobierno sea “salvar” a los bancos”, incluso el 15 de abril del 2020 mediante un decreto de “emergencia” el gobierno intenta salvar al sistema de pensiones privado por intermedio del público, asumiendo el sistema público de pensiones (Colpensiones) el pasivo privado pensional producido por la crisis de la pandemia.

Las anteriores medidas los que traen son un aumento de la desconfianza de la población frente al gobierno, y esto va en contravía de lo que pretende el mismo gobierno: qué confíen en ellos cuando nos dicen: “quédense en casa”. El asilamiento no funciona por varias razones que incluyen la económica (hay que salir a trabajar o si no me muero de hambre), pero también por la desconfianza que genera el mismo gobierno. Cuando los gobernantes y autoridades en cada país hacen un llamado a la calma, esta no funciona porque la población en general no confía en ellos.

Así que quedarse en casa no sólo es un asunto individual de voluntad, para Žižek el enfoque de la responsabilidad individual si bien es necesario, sigue siendo un asunto ideológico que no ayuda a pensar cómo cambiar todo el sistema económico y social (capitalismo neoliberal). En Colombia desde que comenzó el aislamiento preventivo obligatorio, se ha hecho énfasis en la individualización del “no salir”, desconociendo que ese “no salir” no depende de un acto de voluntad sino de toda una realidad que obliga a muchos a salir para subsistir y otras cosas.

Es por eso que para Žižek (2020) hace falta la confianza y la colaboración para tratar la pandemia: “sólo una confianza mutua entre la gente común y el Estado puede hacer el trabajo (p.11), y esa es la única salida para él, aspecto que en Colombia está lejos de suceder, pero no todo está perdido, es por esa misma raíz que hay que construirlo, pero no desde posturas humanistas de todos unidos, ni con posturas belicistas tan arraigas en Colombia “todos unidos haciendo guerra contra”, el asunto para el autor sigue siendo político, y lo seguirá siendo:

Una idea común que circula ahora es que, ya que estamos todos juntos en esta crisis, debemos olvidarnos de la política y trabajar al unísono para salvarnos. Esta noción es falsa: la verdadera política es necesaria ahora - las decisiones sobre la solidaridad son eminentemente políticas (Žižek, 2020, p.57).

La política que nos habla el esloveno tiene que ver con el comunismo, un comunismo que apela a la solidaridad: “una solidaridad total e incondicional y una respuesta coordinada a nivel mundial, una nueva forma de lo que una vez se llamó comunismo” (p.36). Incluso este comunismo serviría para elaborar ese pánico que ha traído consigo el coronavirus: “En todos estos casos, la respuesta no es el pánico sino el trabajo duro y urgente para establecer algún tipo de coordinación mundial eficiente” (p.27).

El pánico trae como consecuencias que no se pueda pensar en serio la pandemia, y tomarnos en serio la pandemia es saber diferenciar desde la pregunta que nos hace Žižek: ¿dónde terminan los datos y comienza la ideología? (p.36), además de “analizar en detalle las condiciones sociales que hicieron posible la epidemia de coronavirus” (p.13).

Este comunismo consecuencia de la pandemia no es el viejo comunismo Estalinista de la antigua URSS: “nos obligará a reinventar el comunismo basado en la confianza en el pueblo y en la ciencia” (p.26). Este comunismo reinventando es más necesario que nunca en la actualidad, ya que las opciones en muchos lugares parecen ser un neodarwinismo llevado al extremo, donde la consigna es la supervivencia del más fuerte. En algunos países esta pandemia y la incapacidad de atender a todos en crisis respiratoria (uno de los síntomas principales del COVIC-19) están colocando a los médicos en una posición éticamente difícil, elegir quien debe vivir y quien no. De ahí que sea imperioso otro tipo de ética, una que trata de no tornarnos individuos pasivos por las circunstancias de la pandemia, donde sólo sea las respuestas del pánico o la supervivencia apolítica. Zizek se opone a esto último, no se resigna a pensar que el mundo será peor después, que vendrá el capitalismo radical más autoritario a confinarnos y controlarnos con aparatos tecnológicos y el big data como de cierta manera también lo ha dicho el filósofo coreano Chul-Han.

La posición política de Žižek no es de un ingenuo positivismo, él sabe que lo mejor o lo peor puede pasar: “Por supuesto, todo fluye en todas las direcciones, de lo mejor a lo peor. Nuestra situación actual es, por lo tanto, profundamente política: nos enfrentamos a opciones radicales” (p.61), pero sea cual fuera estas salidas, siempre se tiene que pensar en una politización de ellas, ya que en Colombia y en otras partes del mundo ya vimos las consecuencias de no politizar las medidas neoliberales que han imperado durante las últimas décadas, convirtiendo al estado en una especie de garante del libre mercado, y a los políticos en sus gerentes.

No hay que aceptar la pandemia del virus como el destino, ese el mensaje del Žižek en este libro, y apuesta por un comunismo del desastre en vez del capitalismo del desastre, donde la idea no sólo salvar nuestras vidas sino transformar la humanidad. Esa es la apuesta.

REFERENCIAS. Poe, E (1844) The Purloined Letter. Estados Unidos: The Gift.

Žižek, S (1994) ¡Goza tu síntoma!: Jacques Lacan dentro y fuera de Hollywood. Buenos Aires: Nueva visión.

Lacan, J (2009) Escritos 1. Buenos Aires: Siglo XXI.

Lacan, J (1988) El seminario de la carta robada. En Escritos 1. Buenos Aires: Siglo XXI.

Žižek, S (2020) ¡Pandemia!: El covid-19 sacude al mundo.

Žižek, S (1989) El sublime objeto de la ideología: Siglo XXI.

AUTORES:
Jairo Gallo Acosta. Psicólogo, Magíster en Psicoanálisis, Doctor en Ciencias Sociales y Humanas. Docente de la Universidad Cooperativa de Colombia, Bogotá.

Nicol A. Barria-Asenjo. Revista Cuadernos de Neuropsicología – Panamerican Journal of Neuropsychology. Asociación Chilena de Revistas Científicas de Psicología.

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