LA COMUNICACIÓN
Todos los seres vivos se comunican de diferentes maneras, algunas las comprendemos y otras están aún en el misterio. En las comunicaciones humanas la fe es esencial para que se mantenga las relaciones. Por ello es necesario recuperar la fe en si mismo y en los demás. Por cierto, que no son pocos los que mienten, actuando de mala fe, con lo que destruyen las relaciones con los otros. Se puede mentir a varios, pero nunca así mismo y menos a todos. Por muy egocéntrico que seamos, finalmente necesitamos la comunicación sobre la base de la verdad. Algunos egoístas nos mentirán para esconder sus defectos, o tratar de mantener sus privilegios o no querer compartir, siendo el egoísmo un serio problema para la comunicación, otros miente sobre un futuro que no vendrá, algunos lo hacen para aparentar lo que no son. Es cierto que todos somos egoístas. Sabemos que el egoísmo es una expresión humana de Inmoderado y excesivo amor a sí mismo, que hace atender desmedidamente al propio interés, sin cuidarse del de los demás. Por cierto, que eso no es problema si no afecta a los demás. Pero, se puede transformar en un problema tanto emocional como económico.
EL ESTADO DE BIENESTAR
Los negocios son los negocios, pero, hacer negocio con la caridad y la solidaridad, es asqueroso y antiético, y si existiera un ser supremo debiera castigarlos como el peor de los pecados. Cabe preguntarse cómo se logró crear instituciones solidarias en Estados liberales, como ejemplo educación gratuita, salud para todos, seguridad social, previsión de reparto, etc. ¿Porque las elites empresariales aceptaron la existencia del Estado de Bienestar que implicaba reducir el lucro? La lucha de clase no es ajena a ese cambio. En efecto, la industrialización salvaje en Europa causo muchos problemas sociales y muchas revueltas contra la explotación, ello forzó a los Estados Europeos a introducir leyes sociales tempranamente (https://www.bbvaopenmind.com/articulos/el-estado-del-bienestar-en-europa/#:~:text=El%20estado%20del%20bienestar%20lleg%C3%B3,pol%C3%ADtico%20y%20cultural%20relativamente%20cohesionado.). Pero, no será hasta después de la segunda guerra que el Estado de bienestar, tal como lo conocemos hoy, se impuso. El fundamento del Estado de Bienestar es sin duda la distribución de la riqueza que el mercado por si mismo no puede resolver. Es entonces la solidaridad. De esta manera van surgiendo normas constitucionales, leyes sociales, laborales y de medio ambiente, en un proceso que ya lleva cerca de cien años. Su fundamento es entonces la solidaridad y el reconocimiento que la distribución adecuada a las necesidades sociales no es una decisión individual, se requieren políticas públicas.
LOS DESC.
El derecho internacional proporciona los fundamentos jurídicos para la solidaridad. La Declaración Universal de Derechos Humanos de Naciones Unidas establece que “toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios”. A pesar de los avances normativos logrados y de la incorporación del derecho internacional en la legislación nacional, la distribución regresiva de los beneficios del crecimiento continua afectando la vida digna para todos. Recordemos que en Chile hay dos clases: la minoría cercana al 9% que tiene todos los beneficios y que recibe la mayor parte del producto y el resto 91% que recibe migajas, con sueldos promedio de 500 dólares mensuales per capita, sin acceso a una salud ni educación de calidad y con pensiones miserables que no permiten siquiera alimentarse, y que ha logrado estabilizar un mínimo de calidad de vida gracias a las políticas públicas adoptadas últimamente. Los Estados, en especial por la vigencia del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, (en adelante PIDESC), están obligados a adoptar todas las medidas necesarias para la realización y efectividad de estos derechos. Sin embargo, falta mucha conciencia para lograrlo.
LA SEGURIDAD SOCIAL
Sabemos que la seguridad social es el conjunto de medidas tomadas por el Estado y la sociedad para proteger a los trabajadores y a sus familias, aliviando su necesidad económica ante una contingencia o riesgo social. Parte importante de ella es el sistema de pensiones cuya base en el ahorro que cada persona realiza durante su vida laboral. Ese ahorro, que se materializa en la cotización del 10% de la remuneración imponible mensual, es depositado en cuentas individuales administradas por empresas privadas a las que el trabajador no tiene acceso salvo que leyes especiales así lo autoricen. Se critica las bajas pensiones y paradojalmente el enriquecimiento de los dueños de las AFP.
El modelo de pensiones, conocido como AFP, ha sido criticado desde su creación cuando miles de trabajadores fueron obligados a ingresar a el, salvo los militares que continuaron con un sistema de reparto. Como sostiene Ricardo Hormazabal el sistema basado en las AFP no surgió para superar las deficiencias del antiguo sistema de reparto, sino que, por otros intereses, de orden político. Además, el sistema de AFP entrega pensiones exiguas para la mayoría de los afiliados y no cumple con las disposiciones internacionales y nacionales sobre la materia. El sistema también ha colaborado a la concentración de la riqueza y a la desigualdad del ingreso. (El sistema de AFP chileno: una visión critica. Estado, Gobierno Y Gestión Pública, 5(9), pp.121/142. ).
¿CÓMO SUPERAR EL EGOISMO?
El trabajo individual es esencial para superarlo, Hay muchos consejo que se dan al respecto, tales como entender qué es el ego y cómo puedes utilizarlo, observarlo y analizarlo, colocarlo en su lugar, encontrar la esencia del yo, y dejar de sentirte ofendido. Sin embargo, con la discusión de la reforma de pensiones parece que se ha detectado un egoísmo social. En efecto, según ciertas encuestas en 60% de las personas consultadas prefieren que un 6% de sus ingresos, en el caso de sueldos altísimos, vayan a sus cuentas individuales y no a un sistema de reparto. Es una paradoja toda vez que la mayoría, el 90% de los asalariados, no les afectará un modelo de cuenta individual, pero si se beneficiará por un sistema de reparto. El problema del egoísmo puede tener consecuencia sociales negativas cuando son muchas las personas que lo declaran abiertamente. Sabemos que, en la vida cotidiana, cuando actuamos egoístamente, tanto individual como colectivamente, damos origen a desacuerdos que destruyen la convivencia. De esa manera la vida en comunidad se hará desagradable. Cuando muchas personas comparten ideas egoístas contribuirán a limitar la capacidad de disfrutar de la vida social, todo quedara bajo sospecha, es una forma de destrucción social. También, el egoísmo tiene un fundamento utópico, se basa en la creencia que se lograran cosas mejores a partir de su ego y transforma en metáfora la publicitada frase, dar hasta que duela.
LA FRATERNIDAD/SOLIDARIDAD
En la mayoría de las constituciones modernas se declara la solidaridad y Fraternidad como elementos esenciales de la convivencia y del orden jurídico, considerado como uno de los valores fundamentales de muchos estados. A menudo se menciona en el preámbulo como uno de los fundamentos de la constitución. Si bien la Constitución actual establece el Estado subsidiario también reconoce el principio de solidaridad como “parte integrante de ordenamiento jurídico de los derechos humanos y como tal, es un componente más del orden público objetivo, que cubre con su manto, la totalidad del Derecho, tanto en su ámbito estatal como en su ámbito extraestatal y supraestatal.” (Aguilar Cavallo, Gonzalo. (2008). PRINCIPIO DE SOLIDARIDAD Y DERECHO PRIVADO: COMENTARIO A UNA SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL. Ius et Praxis, 14(2), 593-610.). Ahora bien, para que los hechos superen a las palabras es necesario que la misma se materialice en leyes solidarias, y ese es sin duda el desafío que tiene el sistema politico al discutir el nuevo proyecto de ley del sistema de pensiones. Sin mentir y sin burlarse de los ciudadanos para que recuperemos la fe en la convivencia.