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Revise su vuelto. Por Alicia Gariazzo

Entre las novedades que hemos vivido en nuestro país en los últimos días, como siempre, se ha destacado el Cuarto Poder. Se han encontrado en su salsa mintiendo sin ningún pudor amparados en las leyes de excepción, de emergencia, o como les llamen. Los canales de TV usan fotografías retrucadas, ocultan información, sobrepasando los límites de la ética. El lunes 4, cuando el país amanecía paralizado por el llamado a Paro Nacional de gremios poderosos como la ANEF y la CONFUSAM, la TV no se refería al hecho y se concentraba en pequeñas historias de los pequeños emprendedores afectados por vandalismo. Incomprensiblemente nos llamaban a “revisar el vuelto” al hace nuestras compras. No cabe duda que hemos hecho méritos para que se nos falte el respeto hasta estos niveles.

Ya estamos acostumbrados a que las noticias que les molestan, como la plantación de mariguana del marido de la señora Van Riesselberger o la sentencia del hijo de Carlos Larraín, desaparezcan después de haberse comentado cinco minutos. Nunca sabemos el desenlace de las vidas de los niños o de las temporeras, afectados por la contaminación de pesticidas. De la destrucción que hace la producción de salmones, el destino de los trabajadores despedidos de sus fuentes de empleo. Nadie nos informó jamás que la modernización de nuestros puertos significó que, solo en Valparaíso, la planta de trabajadores haya pasado de 33.000 a 1.000 trabajadores por las nuevas tecnologías aplicadas. Así hemos aprendido a olvidar, nos tienen el cerebro ocupado en los romances de la farándula o en los casos espectaculares de familiares muertos de los más vulnerables. Nos hemos olvidado de dudar, de hacer análisis. La tendencia es creer, mientras los relacionadores públicos de los grupos económicos se reúnen con los ejecutivos de los canales y les dan la línea. Alberto Mayol decía que tenían un despacho semanal con ese objetivo.

Lo que ha ocurrido en los llamados medios de comunicación en estos días debería denunciarse. Ello podría hacerse si tuviéramos una organización independiente, como las que existen en los países desarrollados, que pudiera desmentir la cantidad de falsedades que hemos escuchado en estos días. Dichas organizaciones pudieron en su tiempo desenmascarar grandes mentiras internacionales, como las orquestadas sobre la invasión a Irak, Afganistán, y otras.

Por lo pronto, las redes sociales que han jugado un gran papel que debemos esperar que dure, deberían informar lo que se oculta. No solo acerca de las luchas y movimientos callejeros, sino en lo que la clase dominante está orquestando paralelamente.

Creo que los grandes despidos de trabajadores que requiere la introducción de las nuevas tecnologías que eliminan fuentes de trabajo, se hará ahora escudándose en los supuestos vandalismos que las eliminaron o en el cierre de empresas debido a lo mismo. No se nos informará de los nuevos negocios que está haciendo Chile vinculados a las energías renovables y a la electromovilidad.

Las nuevas tecnologías son un gran avance para la humanidad, pero eliminan fuentes de trabajo. Es por eso que en Europa se preparan, informando a la población, disminuyendo las horas de trabajo e incluso entregando una renta básica. En dichos países, la educación, que es gratuita, se moderniza para ponerse a tono con las nuevas necesidades y se realizan toda suerte de estímulos a la innovación. Para eso, sin embargo, es necesario que se paguen impuestos. Como acá, los dueños del país no quieren hacerlo, la única alternativa que tienen es estirar el elástico hasta donde más se pueda y paralelamente mandarnos a “revisar el vuelto”.

Nunca supimos, ni se nos informó en los años 90, cuando la mayoría de las empresas fabriles instalaron sus talleres en Asia para usar mano de obra barata. Los trabajadores despedidos comenzaron a trabajar en sus casas, o a vender en las innumerables ferias de las pulgas. Al mismo tiempo, desde el Gobierno, se impulsó la creación de casinos de juego en cada región, la importación de maquinitas de juego para instalar en los barrios populares y se comenzaron a ofrecer múltiples formas de endeudamiento. Así, ignorando el impacto que todas estas actividades tienen en la delincuencia y sus consecuencias, lo único que se perseguía era tapar el desempleo con un dedo. Al mismo tiempo se ha ignorado el ingreso de toneladas de coca de Perú y Bolivia por la Frontera Norte, como lo informara el Subsecretario Cubillos el 2011 en el Congreso Nacional.

Con todo ello se piensa compensar el nuevo desempleo que viene, mientras el empresariado aprovecha las grandes potencialidades que tiene Chile en el futuro inmediato.

La sequía que lo afecta se ha convertido en una oportunidad, porque cuenta con mar a lo largo de toda su geografía y la posibilidad de desalinizar el agua sin mayores problemas. Ya se está desalinizando en Antofagasta para el trabajo de las mineras. La desalinización se hace con energía solar. Se dice que el norte de Chile es privilegiado en cuanto a la energía solar. De acuerdo a expertos el sol de nuestro norte es tan potente que permitiría exportar energía solar a toda América Latina y mucho más.

El país se está preparando para la electromovilidad total, es decir, en algunos años, todos los autos serán eléctricos lo que ya se está impulsando con el transporte público. Ya están llegando 200 buses eléctricos para el Transantiago y se están construyendo cargadores a lo largo del país que también serán manejados por las empresas propietarias de los buses, la mayoría multinacionales.

La buena noticia es que los vehículos eléctricos requieren mucho cobre y las baterías usan mucho litio, es decir la electromovilidad es un gran negocio para los productores de cobre y de litio.

No permitamos que hablen de la pobreza de Chile, de la baja productividad, del bajo crecimiento y de los malos negocios, porque Chile es un país donde la empresa privada se ha hecho rica con todos los negocios montados, el minero, el agropecuario y ahora el de las energías. De ahí es que ya tengamos más de 10 familias entre los multimillonarios más ricos del mundo, lo que todos pueden ver en Internet en los records de la Revista Forbes.

Después de estas maravillosas perspectivas algo soltarán los empresarios, nos decimos, como Luksic que ofreció no pagar menos de 500 mil pesos a sus empleados, pero al no pagar impuestos, el Estado no cuenta con recursos para invertir en protección social y ningún Gobernante ha estado dispuesto a enemistarse con los que no pagan, eluden y evaden. Más aún, decretos de Lagos y Bachelet en el SII, dieron lugar a la figura del perdonazo, los que también pasan rapidito por la prensa. El último, hace unos días, fue a Hites. La razón del perdonazo es que si el empresario debe muchos impuestos, se les condona la deuda, porque si la pagan podrían quebrar y así no “crear empleo”.

Debido a ello, y a que los empresarios solo saben hacer negocios y no proteger ni apoyar, como el propio Presidente, solo tendremos que ayudarnos entre nosotros y lo ocurrido en estos días es un comienzo.

Han aparecido formas de unidad y memoria emocionantes e inspiradoras. Han surgido, o se han destacado, nuevas organizaciones. Incluso algunos Alcaldes están pidiendo que se valorice más el trabajo comunal. Debemos impulsar el trabajo comunitario, la solidaridad dentro de las bases y el desarrollo de las organizaciones que surgieron en estas luchas. Todo está en nosotros, no podemos esperar nada de los empresarios, ni del Estado que ellos han construido.

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