En varias transcripciones del último discurso de Salvador Allende se antepone erróneamente el pronombre “se” –que no fue pronunciado–, a la frase “abrirán la grandes alamedas”, un error que figura incluso en la cita inscrita en el monumento a Salvador Allende frente a La Moneda.
Basta escuchar el audio, que es la única fuente: “Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo, abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.”
Corresponde restituir el texto original por un elemental respeto al celebre discurso. Y también porque el pronombre personal “se” altera su contenido ya que hace desaparecer al sujeto de la oración y la transforma en oración impersonal: dicho así las grandes alamedas se abrirán por sí mismas.
Cuando en realidad, Salvador Allende anuncia que serán los “Trabajadores de mi Patria” –el sujeto de la frase– quienes, a través de su acción colectiva, volverán a abrir las grandes alamedas y construir una sociedad mejor.
Escuhar esa parte del discurso de Salvador Allende
, historiador