Un recuento del Mayo Feminista de 2018, como base para los desafíos aún pendientes. Simone de Beauvoir: “No olviden jamás que bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados. Estos derechos nunca se dan por adquiridos, deben permanecer vigilantes toda la vida”.
Recordar el mayo feminista de 2018 genera cierta nostalgia, especialmente para quienes vivimos ese proceso desde el revuelo de nuestros liceos y universidades. Por primera vez se logró poner en la palestra una problemática crucial dentro de la crisis de la educación chilena, que se había mantenido invisibilizada y que produjo la urgente necesidad de caminar hacia la construcción de una Educación No Sexista.
La violencia sexual ejercida por estudiantes y funcionarios hacia compañeras, fue denunciada y expuesta públicamente debido a la incapacidad de las instituciones educativas. Éstas, que no contaban con los protocolos de acción ante los casos de vulneración, muchas veces no llevaron a cabo los procesos de la manera correspondiente, re victimizando de esta forma a las personas denunciantes, en vez de, muy por el contrario, generar espacios de contención emocional y reparación.
Al igual que una olla a presión, la rabia y la impotencia desataron una de las coyunturas más importantes en Chile de los últimos 10 años. Ese otoño, de manera generalizada, las estudiantes pasaron de visibilizar la violencia física, sexual y psicológica, a cuestionar más de fondo la violencia patriarcal que sistemáticamente reproduce la escuela, y que da cabida para que estos casos de violencia sexual sucedan y queden muchas veces impunes. Es en este marco, que una gran cantidad de liceos y universidades fueron tomadas y ocupadas por sus estudiantes organizadas bajo la premisa y la exigencia de una Educación No Sexista.
El patriarcado en la educación
El patriarcado es un sistema de control y opresión que está presente en todas las áreas de la vida humana. Lo encontramos en lo más estructural de la sociedad, hasta en lo más personal de cada individuo; actuando de manera material y simbólica. La escuela, siendo una institución donde nos desarrollamos y formamos, es un espacio de (…)
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